Peeling se trata de una exfoliación o descamación de la piel que utiliza sustancias químicas o mecánicas sobre la piel para renovar sus capas y eliminar imperfecciones. El objetivo principal es obtener una disminución de las arrugas y, por supuesto, una piel rejuvenecida y luminosa.
Peeling químico: se coloca un producto químico abrasivo sobre la piel para que caiga y aparezca otra piel sin marcas ni lesiones. Los ácidos retinoico, tricloroacético y fenol son algunos de los usados para esta técnica de peeling para descamación, sin embargo el peeling químico puede cambiar su objetivo dependiendo el químico que se coloque, por ejemplo tenemos peeling para hidratación profunda y foto-reparadores como el LACTIPEEL cuyos activos además de eliminar células muertas, hidrata profundamente mejorando la textura, la elasticidad de la piel y el tono cutáneo. Y el peeling DNA RECOVERY PEEL es un sistema reparador de adn, donde los activos liposomados reparan los dímeros de timina del ADN y previenen la formación de nuevos. Acelera el recambio epidérmico mejorando la
textura de la piel y estimulando la regeneración dérmica, disminuyendo la profundidad de las arrugas. Existen distintos tipos de peeling para distintos beneficios y hay peeling que pueden ser utilizados en temporada de verano y otros en invierno. Si bien es común, la obtención de buenos resultados desde la primera sesión, la cantidad de sesiones necesarias para que el tratamiento sea efectivo no deben ser inferiores a 3.